Brevísima cancionela al cantor

un jilguero cualquiera

…desprendiéndose suave,  

como los aires, terco. 

Inocente en su álabe,  

¿quién, arrullado y clueco, 

permanece, azabache,  

pardo y dorado, ebrio  

bajo un sol de jarabe  

altivo? Casi quieto,  

casi adorno del álabe,  

casi arrullo del viento.

CONTACTO